¿Necesito dar mi verdadero nombre en una consulta del Tarot?Y ¿mi fecha de nacimiento?¿Sí? O ¿No?

Te respondo con otra pregunta.

¿La energía del sol necesita de tu nombre o tu fecha de nacimiento para iluminar tu día y darte el calor de sus rayos?

La respuesta en “NO”.

El Tarot tampoco lo necesita, pero facilita tu conexión entre tu cuerpo energético y él. Pero entonces:

¿Es necesario?

La respuesta vuelve a ser “NO”.

El Tarot no necesita ni de tu nombre, ni te tu fecha de nacimiento ni de tu horóscopo. Solo necesita una vía de conexión y puede ser perfectamente tu voz.

Nuestra voz emite unas vibraciones, únicas y propias, y éstas son una perfecta vía de conexión entre el Tarot y nuestro cuerpo energético.

Voy a poner un ejemplo:

“la energía eléctrica para fluir necesita de un enchufe para que podamos conectar un aparato eléctrico (lavadora, nevera, secador,…). Cuando enchufamos este aparato al enchufe y lo hacemos funcionar es cuando la electricidad fluye.”

Esta conexión en el Tarot es la voz, la vibración de tu voz. Un buen tarotista solo con tu voz ya tendría que poder interpretar los mensajes de los Arcanos en las respuestas de tu pregunta, tanto en consultas presenciales como telefónicas. No necesita nada más.

Otro modo de conexión cuando las consultas son presenciales es coger a los Arcanos del Tarot entre tus manos. Al cogerlas, las mezcles o no, ellas identifican tu cuerpo energético por el que se van a trasladar para traerte el mensaje que se halla en esa dimensión que no conocemos por nuestra condición de humanos.

 Para un buen tarotista y para el Tarot no necesitan para nada tus datos personales. Recuerda que tú eres libre de emitir estos datos o no, además te protege la ley de protección de datos personales. El Tarot y el tarotista se rigen única y exclusivamente por las leyes universales de la energía, para nada necesitan de tus datos personales, tan imprescindibles en nuestra sociedad como ciudadanos de ella.

Por ello tu voz o tu contacto con las cartas de los Arcanos son lo único que necesita el Tarot para dar respuesta a tus preguntas, para dar respuesta a los problemas que te atormentan en ese momento de tu vida.

Recuerda que el Tarot te ofrece el LIBRE ALBEDRÍO, siempre desde el respeto, y nada ni nadie puede usurpar esta libertad. La libertad de dar tus datos es tuya y exclusivamente tuya. Si decides dar tus datos personales lógicamente facilitas la conexión entre tu cuerpo energético y el Tarot. Pero la “fluidez energética” nada tiene que ver con tu nombre o fecha de nacimiento si está presente tu voz o tu cuerpo físico en la consulta.

Cuando enciendes una lámpara en la gran ciudad, ésta se enciende en décimas de segundo. Cuando enciendes una lámpara en un pueblo perdido en lo alto de una montaña se enciende también en décimas de segundo. Tal vez con algunas milésimas de décima más, pero inapreciables a nuestros ojos y en nuestro espacio tiempo. La distancia de la central eléctrica solo influye en unas milésimas de una décima de tiempo.

El Tarot es energía y se mueve a través de ella. Esas décimas o milésimas de tiempo que pueda necesitar para realizar su conexión contigo no dependen de tus datos personales. Únicamente depende de tu estado energético, de tu decisión y/o necesidad de consultar al Tarot.

Próximo post:

 ¿La forma de barajar el mazo del Tarot influye en la respuesta de mi problema?

¿Verdad? ¿Mentira?